Regidor Gerardo Zúñiga acusa al alcalde de Puntarenas de ejercer violencia política en sesión municipal
Zúñiga denunció que el alcalde Randall Chavarría incurrió en violencia política en contra de la regidora Cindy Escafí durante la sesión extraordinaria N.°124. El alcalde respondió que el Concejo “no es su jefatura” y pidió respeto a las competencias.

El regidor Gerardo Zúñiga acusó al alcalde Randall Alexis Chavarría Matarrita de haber incurrido en un acto de violencia política contra la regidora Cindy Escafí, durante la sesión extraordinaria N.°124 del Concejo Municipal de Puntarenas, celebrada el 22 de octubre de 2025.
La denuncia se dio al día siguiente, en la sesión ordinaria N.°125, cuando Zúñiga pidió la palabra para leer una carta en la que calificó las expresiones del alcalde como “un acto flagrante de violencia política en razón de género”.
“Ayer estuvimos frente a un acto flagrante de violencia política por parte del señor alcalde en contra de una regidora. Decirle a una regidora que viene a obstruir o que vota todo en contra es coartar la libertad y las atribuciones que tiene un regidor para ejercer su control político”, expresó Zúñiga durante la sesión.
El artículo continúa abajo
Según el regidor, el alcalde habría descalificado públicamente a la regidora Escafí luego de su voto negativo al presupuesto extraordinario N.°3-2025, señalándola como “una gobernadora del no”. Zúñiga sostuvo que estas manifestaciones constituyen intimidación política y una afectación al ejercicio democrático del cargo.
“Aquí no venimos a aprobar todo como el alcalde quiere. Este tipo de conductas son incompatibles con los deberes éticos y legales del puesto”, añadió.
Zúñiga recordó que el Concejo Municipal de Puntarenas ya se adhirió al reglamento de la Ley N.°10.235, “Ley contra la Violencia Política hacia las Mujeres en Razón de Género”, por lo que solicitó que el alcalde se abstenga de comentarios que vulneren la participación política plena e igualitaria de las regidoras.
La regidora Cindy Escafí, por su parte, leyó una carta dirigida al alcalde en la que rechazó “las expresiones de deslegitimación” hacia su labor fiscalizadora y anunció que tomará “las medidas legales necesarias para salvaguardar su honor y función”, si continúan los ataques.
“Mi voto se fundamentó en la legalidad y la buena fe administrativa. No acepto que se me etiquete como obstruccionista por cumplir mi deber de fiscalizar”, expresó Escafí en su intervención.
Durante su respuesta, el alcalde Chavarría no se refirió directamente a las acusaciones, pero pidió respeto a las competencias entre la Administración y el Concejo Municipal.
“A veces se siente como si los regidores fueran mi jefatura, y eso no es así. Tenemos funciones distintas. El Concejo no es mi jefe, ni los regidores tampoco”, afirmó.
La sesión continuó en un ambiente de tensión política, con llamados al respeto y la sana convivencia.
El tema quedó consignado en actas, y Zúñiga confirmó que remitirá su denuncia formalmente al Tribunal Supremo de Elecciones y a la Contraloría General de la República, junto con la carta de la regidora Escafí.







