Según la Encuesta Nacional de Hogares (Enaho) del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) recién publicada, aumentó la pobreza en la Región del Pacífico Central que incluye al cantón central de Puntarenas, pasando de 25,7% a un 29,8%, así como un aumento en la desigualdad medida en el coeficiente de Gini per cápita, mientras que disminuyó el ingreso promedio por hogar en un 11,1% y el ingreso per cápita del hogar en un 4,3%.
Estos datos demuestran el abandono en que sigue estando la provincia de Puntarenas, en donde se encuentran las dos regiones más pobres del país (Brunca y Pacífico Central).
Existen herramientas a las cuales el Gobierno de la República puede sacar provecho para generar miles de empleos directos e indirectos, y reactivar su economía local en la Región del Pacífico Central.
Costa Rica, en el marco de la Comisión Interamericana del Atún Tropical (CIAT), tiene asignado un límite de capacidad de pesca de atún de cerco de 9,364 toneladas, de los cuales en su mayoría están sin utilizar.
Esta capacidad de pesca es un derecho que el país tiene y se debe asignar a barcos de cerco que no hay en nuestro el país, para que pesquen en aguas internacionales.
Durante décadas, se han asignado a embarcaciones que van a descargar en su mayoría el producto a otros países, en donde están las plantas procesadoras que son las que generan miles de empleos y múltiples beneficios en esas comunidades.
Lo anterior hace que se pierda la oportunidad de generar ingresos sanos a la economía del país y de proveer de miles de empleos que pudieran amortiguar la problemática social de provincias costeras como Puntarenas.
El Gobierno de la República tiene total discrecionalidad para regular la asignación de este derecho de pesca en aguas internacionales, que, si no le sacamos provecho, otros países sí lo hacen.
En el país no hay de este tipo de embarcaciones, por lo que ningún pescador nacional puede utilizar esta cuota.
El Ministro de Agricultura Renato Alvarado puede, vía decreto, establecer que dicho derecho se asigne a empresas que presenten propuestas de inversión en tierra con proyectos que generen empleos en el país (mediante plantas procesadoras de atún).
Se puede establecer que la renovación se dará solo si se demuestran avances en la propuesta de inversión realizada y se mantienen los empleos al momento de otorgamiento de la cuota para las plantas que ya operan en el país.
Nicaragua lo está haciendo mediante el Decreto Presidencial N° 09 – 2019 del 04 de abril del 2019 principalmente en sus artículos 17, 22 y 23. En el art. 17 establece plazos de hasta 10 años en el otorgamiento de la cuota para las “inversiones en plantas de proceso o proyectos de inversiones en tierra”.
Y en el art. 22 indica que: “Las empresas beneficiarias de Licencias de Pesca Especial de Atún, los inversionistas o grupos económicos que inviertan en la instalación de plantas procesadoras de Atún en Nicaragua, tendrán prioridad en la asignación de cuotas individuales de acarreo […]”.
Si el Gobierno de la República sigue otorgando la cuota CIAT como se ha realizado siempre, sin utilizar esta herramienta para atraer inversiones que generen empleos en Puntarenas, la única razón es porque no se quiere que lleguen más plantas procesadoras de atún al país.
Debemos entonces preguntarnos: ¿Por qué el Gobierno no promovería la llegada de nuevas plantas procesadoras de atún al país que generen miles de empleos en Puntarenas cuando tiene la cuota CIAT para hacerlo?
Existen empresas que han ofrecido al menos 1.500 empleos directos para Puntarenas si el Gobierno les otorga una parte de la capacidad de acarreo en el marco de la CIAT, pero están esperando cuál será el camino que define el Gobierno en esta materia.
Se podrían generar con el total de la cuota CIAT al menos 3.000 empleos directos en Puntarenas, si el Gobierno así lo quiere y otros miles de empleos indirectos.
La pregunta es: ¿qué hará el señor presidente Carlos Alvarado?
Este es un artículo de opinión escrito por Douglas Salazar Cortés, Máster en Relaciones Internacionales y Diplomacia, Universidad Nacional.