- Ya se trabaja en proyecto para establecer el hospital de Día para pacientes paliativos y fortalecer atención a usuarios de la región Chorotega.
- Los cantones beneficiados son Liberia, Bagaces y La Cruz.
En el hospital Enrique Baltodano Briceño (Liberia) de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) la atención paliativa domiciliar que brinda la Clínica de Control del Dolor y Cuidados Paliativos, beneficia entre 70 y 80 pacientes y sus familias al mes, residentes de los cantones de Liberia, Bagaces y La Cruz.
Es así como estos pacientes con cáncer o con enfermedad en fase terminal por falla de órgano no requieren ser trasladados al centro médico para recibir esta atención paliativa.
Según explica el doctor Fernando Vásquez Lizano, especialista en medicina paliativa y familiar de este establecimiento de salud, el programa de Cuidados Paliativos está compuesto por tres brazos: la atención en consulta externa, la atención hospitalaria y la atención domiciliar.
“La atención domiciliar es un modelo que se basa en la cultura de cuido familiar, aún presente en la región Chorotega, en el que la familia cuidadora asume las funciones de acompañamiento, asistencia básica en la alimentación y tratamiento de deyecciones, suministro de medicamentos orales, y técnico-asistenciales directos como cambios de posición y administración parenteral de medicamentos, previa capacitación y acompañamiento continuo del equipo de soporte domiciliar paliativo”, detalla el médico especialista.
Esta modalidad de atención se brinda a aquellas personas (con cáncer o fase terminal) encamados, con necesidades crecientes de asistencia, con incremento rápido y urgente de control de múltiples y cambiantes síntomas emergentes, que presumiblemente fallecerán en pocos meses, semanas o días.
El equipo de atención domiciliar del hospital de Liberia está conformado por: un médico general con formación en cuidados paliativos, asesorado por dos especialistas en medicina paliativa en adultos, una enfermera, una psicológica especializada en cuidados paliativos y una trabajadora social.
Un aliado importante en este proceso de atención domiciliar es la Asociación Pro-Clínica de Control del Dolor y Cuidados Paliativos Chorotega (ASOPAL Chorotega), la cual por medio de diversas acciones dispone de recursos materiales para fortalecer este proceso de atención que brinda el equipo de atención domiciliar del hospital de Liberia.
Este equipo de atención domiciliar brinda sus cuidados apoyando a la familia cuidadora mediante los siguientes recursos:
- Atención telefónica vía mensajería de WhatsApp con un teléfono celular dedicado exclusivamente a recibir mensajes con las necesidades de los cuidadores. Este teléfono es patrocinado por ASOPAL Chorotega y las llamadas o mensajes son canalizadas por la enfermera paliativista, médico o equipo psicosocial según sea pertinente.
- Atención presencial en el hogar por un médico, una enfermera, una trabajadora social y una psicóloga con frecuencia semanal o mensual según se determinen las necesidades de control de síntomas que experimente el paciente.
- La alianza del hospital Enrique Baltodano con ASOPAL Chorotega permite disponer de un vehículo 4×4 para el traslado de los profesionales del hospital, donde se lleva además equipo técnico para facilitar los cuidados a las familias incluyendo un equipo de ultrasonografía portátil.
- ASOPAL Chorotega también trabaja de la mano con el equipo de profesionales de cuidados paliativos para el préstamo camas articuladas, colchones especiales, concentradores de oxígeno, aspiradores, sillas de baño, entre otros. También el suministro de alimentos para el grupo familiar, pago de servicios eléctricos, agua y funerarios en familias que se ubican en condición de pobreza extrema.
El doctor Vásquez Lizano comenta que hace 20 años “cuando empezamos a implementar cuidados paliativos en Liberia, era común escuchar expresiones de médicos en emergencias como ‘llévese a su mamá para la casa… no hay nada que hacer…’; o frases como: ‘señora, su papá tiene cáncer…el cáncer duele es normal que no duerma por dolor… lléveselo para la casa: eso no es una emergencia’. Es muy satisfactorio saber que hoy tenemos una cultura solidaria en la que se sabe que ‘siempre hay algo que ofrecerle’ ya hay consciencia que podemos brindar a cada persona un final de la vida lo más autónoma posible: libre de dolor, de sensación de ahogo y de soledad… que la tristeza por la despedida puede ser acompañada profesionalmente y las familias no se sientan solas en el proceso. Eso aporta el equipo de Cuidados Paliativos Domiciliares y ASOPAL Chorotega”, resalta el médico.
El doctor Vásquez Lizano señala que visualizan en los próximos años poder ofrecer acceso remoto especializado a todas las familias en los programas de Cuidados Paliativos de la región Chorotega mediante el uso de tecnologías de teleasistencia remota, asistencia 24 horas al día 7 días a la semana, con disponibilidades de atención de emergencias paliativas y atención de agonía y muerte en el hogar.
Por ahora, el servicio se verá fortalecido con la incorporación de una nueva enfermera y un médico especialista en medicina paliativa.
“Con la nueva enfermera dentro de sus funciones estará la de educar a las familias que se preparan para recibir a la persona enferma en su casa y les dará la información requerida para ese proceso de transición” destaca Vásquez.
Con la incorporación del nuevo médico especialista en medicina paliativa les permitirá trabajar en el proyecto de habilitar el hospital de día para pacientes paliativos, para lo cual con el apoyo de la dirección médica se están los primeros pasos para dar forma a esta iniciativa.
En cuanto a la atención de pacientes de cuidados paliativos, la demanda está al alza, ya en el hospital de Liberia se abordan a todos los pacientes que reciben atención oncológica, de enfermedad renal crónica y la población adulta mayor de toda la región Chorotega que acude a estos servicios.