Amenazas vuelven a poner en la mira a regidor Zúñiga
La presidenta del Concejo Municipal de Puntarenas, Kerlyn Annette Molina Corella, denunció públicamente durante la Sesión Ordinaria #137, realizada este 11 de diciembre, que el regidor independiente Gerardo Zúñiga la amenazó con golpearla si no le concedía el uso de la palabra.
La denuncia se dio en plena sesión y ante cámaras, cuando Molina afirmó que este tipo de comportamientos han sido constantes desde el inicio de su gestión.
“Siempre me ha violentado desde el día uno”
Durante su intervención, la presidenta del Concejo fue enfática al señalar la gravedad de lo ocurrido:
“Voy a decir en cámaras una vez más: el regidor que, antes de estar sentado en este curul, nos amenazó de que si hacíamos lo contrario a él nos mandaba a matar, hoy dijo que si yo no le daba la palabra me arriaba”, expresó Molina.
Según su versión, la amenaza se realizó fuera de micrófono, mientras ella respetaba el orden de la palabra previamente asignado al alcalde Randall Chavarría.
Molina agregó que Zúñiga no expresó la amenaza de forma pública, lo que calificó como una falta de valentía política.
A pesar del señalamiento, la sesión continuó según la agenda establecida, sin interrupciones formales.
Antecedentes por amenazas más graves
El nombre de Gerardo Zúñiga no es nuevo en controversias. A inicios de 2024, el regidor fue duramente cuestionado tras declarar que mandaría a “asesinar” a otros regidores que no apoyaran ciertos proyectos municipales.
Las declaraciones se dieron durante una entrevista en el programa “Hablemos al Chile”, del medio local PuertoTVCR.
En ese espacio, Zúñiga aseguró que, si los regidores se oponían a iniciativas vinculadas con la entonces candidata a alcaldesa Karla Prendas, tomaría represalias extremas.
“Entonces lo vamos a mandar a que lo asesinen, porque está en contra del desarrollo y en contra del progreso de la provincia”, dijo textualmente durante la entrevista.
Retractación y salida del PLP
Tras el escándalo nacional que provocaron sus palabras, Zúñiga publicó un video donde se retractó y aseguró asumir la responsabilidad por sus declaraciones.
Posteriormente, renunció al Partido Liberal Progresista (PLP), al que pertenecía en ese momento.
“Lamento mis declaraciones inoportunas e inconvenientes en medio de la crisis de violencia que atraviesa nuestra provincia y nuestro país”, señaló.
Añadió que se trató de un error personal y afirmó ser una persona “temerosa de Dios, sencilla y conocedora de la ley”.
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