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Guardacostas rescatan a nicaragüenses que estaban a la deriva

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Con dos días a la deriva, y cuando ya se les acaban las provisiones, por fin la marea los arrastró hasta donde pudieron tener señal de celular para pedir auxilio.

Así fue como cuatro pescadores nicaragüenses, residentes en nuestro país, fueron rescatados por personal de la Estación de Guardacostas de Quepos.

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El incidente ingresó vía 9-1-1 el sábado a las 10:42 de la mañana al Centro de Operaciones del Guardacostas.

En el reporte se indicaba que había cuatro tripulantes a bordo de la embarcación de nombre Eliana, con matricula de Quepos PQ 4886. 

Los pescadores se encontraban en ese momento a la deriva, a 20 millas náuticas al norte de Quepos.

De inmediato fue enviada a dicha ubicación la embarcación interceptora 45-02 de la Estación de Guardacostas de Quepos para que atendiera el incidente.

Fue así como envía al ser la 1 p.m. los guardacostas localizaron la lancha Eliana a la deriva 20 millas náuticas al sur de Quepos y 16 millas frente a a Bahía Ballena de Osa.

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Los tripulantes habían salido de Quepos desde el martes pasado y estaban pescando a unas 30 millas náuticas de isla del Caño.

Todo transcurría normalmente, hasta que el jueves pasado experimentaron una falla en el motor, quedándose a la deriva.

Lo anterior según lo referido por el capitán de la embarcación, identificado como Justo Alberto Molina Bermúdez, de 26 años de edad.

Los otros tres pescadores fueron identificados como Juan Carlos Flores Bermúdez, de 31 años, Winston José Carrillo Aragón, de 24 años y Léster Antonio Lopez García, de 27 años.

Los cuatro son nicaragüenses con residencia legal en territorio costarricense.

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Molina agregó que, tras quedarse sin señal telefónica, las corrientes empujaron la nave hasta la costa, logrando así obtener señal para comunicarse vía celular.


En ese momento ya estaban casi sin agua y comida, por lo no lo pensaron dos veces para pedir ayuda por medio del sistema de emergencias 9-1-1.

Los cuatro tripulantes viven en Quepos, por lo cual los guardacostas los dejaron sanos y salvos en ese puerto junto con su lancha, la cual fue remolcada.

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